martes, 18 de marzo de 2014

¿Cómo proteger a los niños , los más vulnerables en un accidente de tráfico ?

Los niños son los más vulnerables cuando se produce un accidente de tráfico y la única manera de cuidar su vida en estas circunstancias es conseguir que viajen siempre bien sujetos y protegidos, con un sistema de retención adaptado a su edad y su tamaño, y perfectamente bien ajustado. Esa es la responsabilidad de los padres.
En 2012, 11 de los 36 menores fallecidos en accidentes de tráfico en vías interurbanas no llevaban puesto ningún sistema de retención, según los datos de la DGT. Esta situación muestra un panorama aún peor cuando se analizan los accidentes en vías urbanas, ya que en este caso ninguno de los cuatro fallecidos lo llevaba puesto en el momento del accidente.
Según un estudio de la Asociación Española de Productos para la Infancia, estos elementos de retención pueden prevenir entre un 50 y un 80% de las heridas graves o mortales producidas en un accidente. Pese a ello, todavía hay muchos conductores y padres que por no molestarse en perder unos minutos en sujetar el cinturón y en convencer a sus hijos para que se lo pongan, hacen cada día sus desplazamientos sin que los niños los utilicen.
Un niño que va sin un sistema de retención y situado entre los dos asientos delanteros, y en teoría sujeto entre ambos, si se produce un choque o simplemente una frenada brusca, el pequeño saldrá volando hasta chocar contra el cristal delantero, y en ese desplazamientos brutal puede sufrir lesiones muy graves e incluso perder la vida.
Lo peor es que pese a que no cuesta nada ponerse el cinturón y que todos los estudios demuestran que usar este elemento salvaría muchas vidas humanas, todavía hay muchos conductores adultos que no lo usan o que dejan que otras personas que viajan en su coche no lo usen. El dato más claro es que un 20% de los muertos en accidente de tráfico no llevaban el cinturón puesto, pese a que es obligatorio y salva muchas vidas. Y al menos en algunos casos podría haber salvado la vida de alguno de los fallecidos.
Pero si en cualquier persona mayor es lamentable que no use el cinturón, lo es aún mucho más pensar que muchas padres son capaces de arrancar su coche sin que sus hijos se hayan instalado en su correspondiente sistema de retención en función de su edad. Ya sea un capazo, una sillita de bebé, una silla o simplemente un cojín elevador, y siempre en combinación con el cinturón, esto les puede salvar la vida si se produce un accidente.

                                                                                                      María